El Pacto Mosaico
Dios le dijo a Abraham que sería padre de una descendencia innumerable que heredaría la tierra de Canaán, y más adelante le muestra lo siguiente:"Entonces Jehová dijo a Abram: Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años. Mas también a la nación a la cual servirán, juzgaré yo; y después de esto saldrán con gran riqueza" (Gn 15:13-14).
Abraham vivió en el siglo XIX A.C, y Dios sacó a Israel de Egipto cerca del siglo XIV A.C; y como sabemos Dios usó a José (bisnieto de Abraham) para evitar la sequía de siete años que asoló aquellas tierras en esos días, y el libro de Génesis termina con una descendencia innumerable pero sin tierra; además que al morir José se levantaron reyes en Egipto que no lo conocían e Isreal terminó esclavo en Egipto.
Sin embargo leemos en Éxodo 2:24 así: "Y oyó Dios el gemido de ellos, y se acordó de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob." Por lo que el Señor los sacó de Egipto a través de Moisés, y los llevó camino a la tierra prometida a Abraham, pero antes deberían llegar al monte Sinaí porque Dios haría un pacto con los descendientes de Abrabam:
"Y tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: Haremos todas las cosas que Jehová ha dicho, y obedeceremos. Entonces Moisés tomó la sangre y roció sobre el pueblo, y dijo: He aquí la sangre del pacto que Jehová ha hecho con vosotros sobre todas estas cosas."(Éxodo 24:7-8)
Como hemos definido ya, un pacto es un compromiso bajo sanción, en el Sinaí Dios les dio leyes al pueblo de Israel, y ellos se comprometieron a obedecer, y si lo hacían Dios les promete permanencia en Canaán, pero sino obedecen la sangre del pacto rociada sobre ellos era un recordatorio de que serían castigados. El Pacto del Sinaí al igual que el Pacto de Abraham: fue hecho con los descendientes de Abraham, tenía las mismas sanciones de expulsión de la tierra; ambos eran pactos de obras, porque para recibir lo prometido debían obedecer; en el pacto Sinaítico se añadían leyes ya que este pacto iba a servir como la constitución de la futura 'nación' de Israel que estaba por entrar a Canaán y constituirse un reino. En el pacto de Abraham sólo había una ley: La Circuncisión, pero en el Pacto del Sinaí se añadían varias leyes que Israel debía cumplir para recibir lo prometido en el Pacto de Abraham.
Por tanto, el Pacto de Abraham definió el pueblo y la tierra del reino de Israel: Los descendientes de Abraban en Canaán; y el Pacto Sinaítico o Mosaíco definía las leyes del reino de Israel, que estaba a las vísperas de su entrada a Canaán. Estas leyes han sido clasificadas así: leyes civiles, leyes ceremoniales y leyes dietéticas, además de que estaban incluidas las leyes Morales que son eternas e inmutables (Ex 20). Si Israel obedece el Pacto Mosaico disfrutará las bendiciones del Pacto Abrahámico, las promesas de ambos pacto son las mismas (Jer 7:3-7).
Es importante saber que Israel violó constantemente el pacto, vemos que sólo días después de jurar obediencia a Dios en este pacto, hicieron un becerro de oro. Leemos del profeta Jeremías, cientos de años después del éxodo de Egipto, así: "...han vuelto a las maldades de sus primeros padres, los cuales no quisieron escuchar mis palabras, y se fueron tras dioses ajenos para servirles; la casa de Israel y la casa de Judá invalidaron mi pacto, el cual había yo concertado con sus padres." (Jeremías 11:10). Este pacto no ofrecía un nuevo corazón a los israelitas por lo que era de esperar que ellos desobedecieran, pero Dios dio una forma en que los israelitas podrían alcanzar un perdón dentro del pacto, a través de un sistema de sacrificios, recordando a los judíos constantemente su pecado y necesidad de perdón y nuevo corazón.
Es muy interesante que en Hebreos 9:13 dice que "... la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne...", los sacrificios del Pacto Mosaíco otorgaba restauración para la vida en Canaán, que es lo que el Pacto de Abraham y del Sinaí prometen o sancionan si los obedecen o violan, por lo que este perdón no era eterno sino perdón terrenal, estos sacrificios no purificaban la conciencia (Heb 9:14), daban perdón en la corte de Canaán pero no en la corte celestial, estos pactos, entonces, eran terrenales porque sus promesas eran terrenales (vida en la tierra de Canaán) y sus sanciones eran expulsión de la tierra de Canaán. Así apuntaban a la necesidad de un sacrificio perfecto que perdone los pecados y los libre del infierno. Como decía un puritano: En virtud de los pactos de Israel ni se daba vida eterna a ningún hombre ni se condenaba eternamente a ningún hombre, ya que el Pacto de Obras era el que condenó al hombre y el Pacto de Gracia es el que le da vida eterna. El Pacto Mosaico tenía el objetivo de preparar la venida de Cristo, como dice el pastor bautista Pascal Denault: "...el Antiguo Pacto era, para el pueblo de Israel, un pacto tipológico, terrenal y condicional..."; esto lo explicaré en otra entrada
Por Daniel Pardías
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